Muy buenas noticias han llegado a las personas con problemas foliculares. Una investigadora de la Universidad de Columbia en Nueva York, la Dra. Angela Christiano, ha multiplicado con éxito las células madre del folículo piloso que luego pudieron hacer crecer el cabello en la piel humana real. Por supuesto, la piel era prepucio infantil (elegido por estar completamente sin pelo de forma natural), y se injertó (o se colocó permanentemente) en ratas de laboratorio.
Las células madre, llamadas células de la papila, son las que impulsan el crecimiento del vello de los folículos capilares humanos. Están presentes en todos los folículos y son responsables de causar el crecimiento del cabello. Se ha especulado durante mucho tiempo que si hubiera alguna forma de obtener estas células papilas en cantidades suficientes y luego implantarlas en el cuero cabelludo calvo, podrían iniciar el crecimiento de los cabellos normales. El desafío hasta ahora ha sido la dificultad de multiplicar o hacer crecer lo suficiente estas células de papila para que luego puedan usarse para causar el crecimiento del cabello. El Dr. Christiano descubrió una técnica para cultivar estas células en grandes cantidades, en donde en lugar de alinear las células una por una, una al lado de la otra, se les permitió agruparse. Al permitir un contacto tridimensional tan cercano, las células de papila respondieron a esto haciendo crecer nuevos pelos cuando se inyectaron en el prepucio sin pelo.
El equipo de investigación advierte en este punto que la técnica aún está en desarrollo temprano, y que podrían pasar años hasta que pueda ser utilizada efectivamente en seres humanos, en lugar de ratas con prepucio humano injertado en sus espaldas. Actualmente, existen otras técnicas efectivas para restaurar el cabello en áreas calvas o poco pobladas. Apropiada para la mayoría de los hombres y mujeres, la técnica más común es el trasplante de cabello o el injerto de cabello.
El trasplante de cabello implica la redistribución de los propios pelos de un individuo, tomados de áreas de abundancia (generalmente la parte posterior y / o los lados del cuero cabelludo) y colocados en las áreas de pérdida de cabello. Una vez trasplantados, estos pelos continuarán creciendo de por vida. Hay dos métodos para obtener los cabellos donantes. La más común y familiar es la técnica de injerto de unidad folicular o «tira» (FUG), mediante la cual todos los pelos se diseccionan de una sola tira o pedazo de cuero cabelludo de la parte posterior de la cabeza. Mientras está suturada, esta tira donante generalmente se cura como una cicatriz de línea fina, pero en algunos casos puede ensancharse y ser visible con el cabello corto.
La otra técnica de injerto de cabello más contemporánea se llama extracción de unidades foliculares (FUE),donde los pelos del donante se extraen uno por uno de la parte posterior de la cabeza. La principal ventaja de FUE es que no hay cicatriz en el sitio donante lineal, lo que permite a los pacientes cortarse el cabello lo más corto posible, una gran mejora. Tanto las técnicas FUE como FUG son, cuando se realizan correctamente, igualmente efectivas tanto en mujeres como en hombres.